Dos aerolíneas colombianas dejan de operar en semanas. ¿Qué esta pasando?

(CNN Español) — Dos aerolíneas colombianas de bajo costo anunciaron, con semanas de diferencia, que dejarían de operar en el país por razones financieras, dejando en tierra a miles de pasajeros que habían comprado sus boletos de avión con anticipación.

El primer anuncio lo hizo la aerolínea colombiana Viva Air. El 27 de febrero, la aerolínea señaló repentinamente el cese de sus actividades aduciendo problemas económicos, por lo que había aceptado en los meses anteriores el proceso de reanudación de la actividad, que permite a las empresas en crisis financiera declararse en quiebra.

La Aeronáutica Civil de Colombia autorizó la fusión de Avianca con Viva Air, pero con ciertas condiciones como la preservación del esquema bajo costot de Viva Air, y el restablecimiento de frecuencias de vuelo en la ruta Bogotá-Buenos Aires, que se vio particularmente afectada. Avianca dijo en un comunicado el 22 de marzo que “estudiará la resolución e implicaciones de las medidas propuestas por la autoridad a la brevedad para determinar la viabilidad” de cumplir con estas condiciones.

Muchos pasajeros en Argentina, Perú y Colombia se han visto afectados por esta medida.

Pasajeros varados intentan ingresar al aeropuerto de la ciudad de Cusco, en el sureste de Perú, luego de que la aerolínea colombiana de bajo costo Viva Air cesara abruptamente sus operaciones el 28 de febrero de 2023. (Ivan FLORES / AFP) (Foto de IVAN FLORES/AFP a través de Getty Images)

El siguiente anuncio lo hizo este miércoles otra aerolínea: Ultra Air, una empresa con sede en Medellín que apenas llevaba un año en funcionamiento. En un comunicado, Ultra anunció que a partir de las 00:00 horas del 30 de marzo suspendía operaciones y no volaría en ninguna de sus rutas. Las razones incluyen, entre otras, el aumento de los precios del combustible, los tipos de cambio de divisas y el aumento de los costos para las aerolíneas, dijo en el comunicado.

Ultra, que tenía una participación del 8% del mercado colombiano, según la empresa, inicialmente operaba con seis aviones, pero en las últimas semanas solo ha operado con tres.

El jueves por la tarde, el presidente Gustavo Petro anunció en su cuenta de Twitter que ante el cese de operaciones de Viva Air y Ultra, ordenó que todos los aviones de la Fuerza Aérea Colombiana, incluido el avión presidencial, “desde este momento estén listos para el transporte de los usuarios interesados”.

Sobre la situación de Ultra Air, el Ministro de Transporte de Colombia, Guillermo Reyes, dijo que “Se hicieron varios intentos de capitalizar, vender la aerolínea, [pero] Ninguno de ellos prosperó».

“La decisión nos genera una gran preocupación, una gran afectación para nuestros viajeros”, Reyes dijo en un comunicado este miercoles. El Ministro de Transporte agregó que se ha activado un plan de contingencia con Aeronáutica Civil y la Superintendencia, y han solicitado una lista de pasajeros de Ultra Air para exigir la reprogramación o el pago en efectivo de los boletos aéreos de los afectados.

La Superintendencia de Transporte de Colombia exigió a la aerolínea implementar un plan especial para atender a los pasajeros y mantener canales de comunicación con los usuarios. Además, solicitó que se inicie el concurso de acreedores de la aerolínea.

La noticia llega en un momento crítico, antes de Semana Santa, cuando se espera que millones viajen por aire y carretera para este día de temporada alta en el país.

El ministro de Transporte dijo que esperaba que otras aerolíneas como Wingo, Avianca, Latam, Satena y Easy puedan transportar a los viajeros afectados.

Un avión de Ultra air llega al Aeropuerto Internacional El Dorado, en Bogotá, el 14 de mayo de 2022. AFP PHOTO/Daniel MUNOZ (Photo by DANIEL MUNOZ/AFP)

¿Qué pasó con esas aerolíneas de bajo costo en Colombia?

La crisis económica mundial, los altos precios de los combustibles tras la guerra de Rusia en Ucrania, la devaluación del peso colombiano y el aumento de los impuestos a los boletos aéreos son algunas de las razones por las que expertos consultados por CNN coinciden en las causas del cese de las actividades de estos dos empresas de bajo coste.

“Hemos estado viviendo una devaluación muy importante desde 2022, principalmente, y el alto precio del combustible obviamente ha empujado los presupuestos estimados que las aerolíneas tenían que sobrepasar”, dijo a CNN en Español Claudia Velásquez, consultora en asuntos aeronáuticos, turismo. Infraestructura, con sede en Bogotá.

Sumado a esto, dice Velásquez, debido a la fuerte competitividad del mercado de transporte aéreo de pasajeros en Colombia, y más aún tras la crisis provocada por el covid-19, el modelo de aerolínea de bajo costo puede ser difícil de mantenerse en el país. .

“Hay muchos operadores compitiendo en el mercado, lo que genera competencia en los precios, lo que en ocasiones no les permite aumentar los valores que deberían ser por el crecimiento de los precios de los combustibles”, agregó Velásquez.

Agregó que hay un «aumento sustancial de un insumo externo, que es el combustible y la gran devaluación del peso colombiano que tiene un impacto enorme, porque el 60% de la estructura de costos de las aerolíneas está en dólares y si los ingresos están en pesos, no hay resto para compensar esta discrepancia».

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Otro factor mencionado por los expertos, que podría explicar la crisis de estas aerolíneas, es la alta carga tributaria de los boletos aéreos, que en Colombia ha pasado del 5% -que fue un incentivo durante la pandemia- al 19%, que los encareció. a partir de enero de 2023.

Sin embargo, aclara el experto, los casos de Viva Air y Ultra Air son coyunturales, y en Colombia no se debe hablar de una “crisis aérea”, pues aún existen varias empresas que pueden atender el mercado de servicios aéreos de pasajeros.

“Decimos que tenemos seis aerolíneas en el mercado colombiano con capacidad para asumir el transporte de pasajeros que quieran viajar para semana santa, y los que quieran viajar para junio, julio, en caso de que la situación [de las aerolíneas] no te recompongas”, dijo Velásquez, quien advirtió que es muy posible que los precios de los boletos de avión aumenten en los próximos días.

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Más oportunidades para el sector

La salida de aerolíneas del mercado es una situación «bastante común» en la industria, según el consultor de aviación René Armas Maes.

“Es un negocio intensivo en capital con una marcada estacionalidad y altos costos, incluidos los precios del combustible que están estrechamente relacionados con la rentabilidad”, dijo Armas Maes a CNN por correo electrónico. “Además, es una empresa que, en comparación con otras industrias, en promedio, los márgenes son más bajos”.

Y si la pérdida de rutas y aviones -como en el caso de Viva Air y Ultra Air- es siempre “una pérdida para el país y los consumidores”, según Armas Maes, también es una oportunidad para otras compañías aéreas.

“La industria de las aerolíneas es un negocio dinámico con oportunidades”, escribió el experto a CNN. “Cuando un actor desaparece de un curso o reduce las frecuencias, otros aprovechan para reposicionarse y crecer”.

En este caso, la oportunidad de apoderarse de este sector del mercado dejado vacío por Viva Air y Ultra Air será para aerolíneas que continúan operando como Avianca, Wingo, LATAM Airlines, EasyFly, Satena y Copa Airlines.

Y es probable que las condiciones que crean complicaciones para las aerolíneas en la actualidad persistan en el futuro cercano, advirtió Armas Maes.

«El costo del combustible, que se espera que aumente en abril y se mantenga alto al menos hasta septiembre… y los crecientes costos operativos unitarios seguirán planteando desafíos para las aerolíneas de la región.

«Del mismo modo, persisten otras preocupaciones macroeconómicas clave que podrían limitar la demanda y la generación de ingresos para las aerolíneas, como la aceleración de la inflación y, como resultado, una mayor debilidad en el poder adquisitivo. Asimismo, una mayor depreciación de la moneda, el aumento de las tasas de interés y los altos niveles de crédito al consumo y la deuda de tarjetas, entre otros, son riesgos palpables”, escribió Armas Maes.

Pero, apunta la consultora, lo que ocurra ahora dependerá del regulador, que deberá comprobar el número de plazas, comprobar las tarifas y poner controles “para que haya una sana competencia y no se afecte a los consumidores”.

Y ante la pregunta de por qué el modelo de aerolíneas de bajo costo está amenazado en Colombia, además de variables externas como el precio de los combustibles y la devaluación del peso colombiano, Velásquez señala que en general, en la región, es necesario que las empresas tienen «más apoyo económico que ante estas variables, porque pueden resistir», y aunque lleguen huracanes y crisis económicas, pueden seguir operando después de situaciones como estas.

Granados Olivas
Camelia Granados Olivas