(CNN Español) — Los dos turistas estadounidenses, una mujer y un hombre, encontrados muertos en un hotel en México han sido identificados como Abby Lutz, de 28 años, y John Heathco, de 41, según la media hermana de Lutz, Gabrielle Slate.
Más temprano, un vocero del Departamento de Estado informó que dos ciudadanos estadounidenses fueron encontrados muertos en una habitación de hotel en México el martes.
Por su parte, la Procuraduría General de Justicia del estado de Baja California Sur indicó en un comunicado de prensa que las dos personas halladas muertas se encontraban en un hotel de la comunidad El Pescadero, en la delegación Todos Santos. También dijo que murieron por envenenamiento por una sustancia aún por determinar.
La autopsia determinó que la causa de la muerte fue envenenamiento «por una sustancia a determinar sin rastros de violencia en el cuerpo», dijo la entidad.
Este jueves, Slate compartió que habló con su media hermana a principios de semana mientras ella estaba de vacaciones con su novio Heathco en México.
Slate explicó que la pareja pensó que tenían una intoxicación alimentaria. “Habían estado enfermos durante varios días. Ella había ido al hospital para que le pusieran una vía intravenosa y regresó al hotel sintiéndose mejor. Y pasaron un día disfrutando de su viaje y todo estaba bien, luego nos informaron ayer sobre su muerte. ”, dijo Slate en una conversación en CNN.
El lugar donde se encontraron los dos ciudadanos estadounidenses muertos.
«Solo queremos que todos sepan cuánto la amamos y fue demasiado. La extrañaremos. Y estamos tristes de que haya sucedido así».
Slate realizó una campaña de GoFundMe, que está verificada, y recaudó más de $9600.
Las autoridades acudieron al hotel el martes por la noche después de una llamada. Al llegar, encontraron a la pareja muerta durante unas 10 u 11 horas, dijeron las autoridades.
«Expresamos nuestras más profundas condolencias a las familias por su pérdida», dijo el portavoz del Departamento de Estado de EE. UU. «Seguimos de cerca la investigación de las autoridades locales sobre la causa de la muerte».
El FBI, por su parte, no está involucrado en la investigación, dijo a CNN una fuente policial estadounidense con conocimiento del incidente.
Henar Gil, gerente general de Rancho Pescadero, dijo que estaban «desconsolados», pero agregó que no tenían conocimiento de ninguna amenaza a los clientes y que estaban trabajando con las autoridades para investigar.
Gil agregó: «No hubo evidencia de violencia relacionada con esta situación, y no tenemos conocimiento de ninguna amenaza a la seguridad o el bienestar de los invitados».
— Fidel Gutiérrez contribuyó a este despacho.